Por: Alejandro Barbosa Valderrama y Juan Pablo Puerto.
Fotos: Lina Chaparro.
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El primer contacto de El Fortín del caballero negro con Angeles Del Infierno tuvo lugar en abril de 2000 en el Hotel Hamilton Curt durante su visita para el concierto Rock Bogotá con agrupaciones como Molotov, Animal y Ultrágeno. Allí el caballero pudo comprobar la calidad de personas que son Robert Álvarez, guitarra solista y Juan Gallardo, vocalista de los apóstoles del metal. En el caso de Gallardo, un hombre serio en su trabajo que dedica su tiempo a mantenerse en buena forma para salir entero a los escenarios durante las extensas giras de la banda. Así funciona todo desde hace más de 26 años, cuando Álvarez después de audicionar a 14 vocalistas encontró a su cómplice y amigo con el que ha compuesto la mayoría de los temas musicales de Angeles. Lector asiduo de la filosofía budista como el TAOISMO y de Herman Hesse, en especial de sus obras DEMIAN, EL JUEGO DE LOS ABALORIOS o EL LOBO ESTEPARIO, Juan Gallardo, dueño y señor de una técnica vocal auténtica e inigualable en el rock en castellano concedió una entrevista exclusiva para El Fortín y Rock City Night, un medio colega, cuyo motor es el apoyo a la cultura del rock nacional y universal.
Alejandro Barbosa: Cómo fue su experiencia cuando Robert tenía la banda The Flood al ser llamado a ocupar el lugar de cantante en la agrupación?
Juan Gallardo: Yo llegué allí porque vivíamos cerca a unos ocho kilómetros aunque no nos conocíamos. Yo residía en Almeria y ellos en Lasarte Guipúzcoa. Yo pasaba en el carro. Tendría como 21 años cuando eso. Escuché unos acordes, tocadistas de guitarra y me bajé. Tenían una perra pastor alemán que se llamaba Layla como la canción de Eric Clapton y la jodida de la perra que vigilaba la puerta casi me muerde. Estuve a punto de desistir, sin embargo toqué a la puerta otra vez. Me abrió Robert. Me invitó a cantar. Hicimos unas pruebas. Empezamos a platicar y así comenzó todo.
Juan Pablo Puerto: De antemano bienvenidos. Para nosotros es grato contar con la presencia de Angeles Del Infierno aquí en Colombia, un ícomo del metal en castellano y mundial. ¿Cómo ha sido la evolución desde que usted ingresó a la banda a la que es hoy Angeles Del Infierno? ¿Qué ha sido lo que más le ha marcado personalmente y como banda?
JG: Al transcurrir de los años uno se curte de vivencias. Nosotros a lo largo de la vida cambiamos a veces a peor a veces a mejor y otras sin darnos cuenta (Risas). Pero fuera de bromas a nivel musical hemos evolucionado por la cantidad de conciertos vividos. Hemos tocado en multitud de países y el balance actual es super positivo y nos encontramos casi que con la misma ilusión del primer día. Mantenemos el espíritu del rock and roll de diversión, de hacer las cosas bien y seguimos en esa tónica siempre. Cada vez que me subo al escenario me inquieto un poco que es bueno para estar alerta de las cosas. En el momento que uno crea que lo sabe todo está perdido y me causa la misma sensación que el primer día. La misma adrenalina! Eso es muy bonito porque en el momento en que ya no se le erice a uno la piel, al salir ante un público se tiene que ir para su casa.
AB: Cuál ha sido el trabajo más significativo durante toda su carrera y por qué?
JG: Cada uno es diferente. Tenga usted en cuanta que PACTO CON EL DIABLO fue un disco monumental pero no menos fue DIABOLICCA, JÓVEN PARA MORIR o A CARA O CRUZ que es un trabajo muy técnico. Está muy bien tocado el 666. Uno de los más vendidos y tiene un estilo ligeramente distinto al resto. Para mí A CARA O CRUZ es un disco bien ejecutado y canciones extraordinarias. Técnicamente el mejor.
AB: Hablemos sobre TODOS SOMOS Angeles y una canción en particular que es «América», un tema donde se habla de nuestros ancestros indígenas. Durante la historia nuestros pueblos fueron atropellados y avasallados por los conquistadores de España. Por ejemplo en Perú los atropellos que cometió Francisco Pizarro con los indios al colocarles herrajes en sus pies, además de asesinar a Atahualpa a quien guardaba respeto en principio y luego lo sometió también. Ustedes como españoles valoraron estas culturas y las destacan en el disco.
JG: A raíz de que llevamos 20 años en América. Hemos viajado por Centro América, Sur América y todo México. Por ejemplo allí hay 11 millones de indígenas. Nos llamó la atención la cultura de la tierra. Como viven. Hemos conocido a algunos cuantos y nos dio por componer una canción de ese tipo que es interesante porque es diferente. Yo toco percusión allí. «Conga-Tumba». Como contenido de la canción tiene su rollo. Frente a lo que usted menciona todos esos personajes se les pasó la mano y hoy la cuenta de cobro es para los sucesores de estas mentes enfermas como en su momento Hitler, Stalin, etc. Antiguamente los conquistadores por su afán de codicia y poder pisotearon estas ricas culturas.
JPP: Quiero que nos hable un poco del «Rey» que es un tema original de José Alfredo Jiménez. Esta canción es un cover contenido en TODOS SOMOS ANGELES.
JG: Hay más de 100 versiones de ese tema. MANÁ tiene una. Nosotros quisimos hacer una versión pero en Thrash metal. A toda velocidad como ustedes pueden comprobar en tiempo rápido y a toda hostia. Yo creo que quedó graciosa.
JPP: Cómo ha sido la relación extra banda entre los dos líderes de la agrupación Robert y Juan.
JG: Ya ni nos insultamos. Que ya sobra (risas…) Somos de la familia. Como hermanos. Yo paso más tiempo con Robert que con mi familia. Y él conmigo igual.
JPP: Qué puede usted decirle a los nuevos talentos del metal. Los que están hasta ahora por comenzar una carrera y tienen el ideal de llegar a ser una buena banda de heavy metal. Ustedes por ser precursores e insignias del rock qué consejos les podrían dar a ellos no sólo de Colombia sino del mundo?
JG. Hay que tener mucha ilusión, además de que les guste el rock and roll. No pensar en cosas comerciales, ni en llenarse de dinero. Hacer canciones sin pensar en que van a vender discos, sino darle con mucho entusiasmo. Esto es como una enfermedad buena. Cuando te pica el gusano del rock and roll hasta que te mueres.
AB: Háblenos de las baladas y la connotación que tienen para sus discos?
JG: Generalmente en cada disco hacemos dos baladas. Procuramos tratar los temas de «amor». No el clásico sentimiento de me voy a la playa y te quiero mucho. Es más concianzudo e introspectivo el tema porque canciones hay 20 millones y es muy fácil hacerlas. Lo importante es hacer canciones que tengan un contenido y un continente. Que te pongan los pelos de punta. Es más difícil de hacer de esa manera con una música adecuada. Por ejemplo «Jugando al amor» le metimos un rollo de música clásica. Una sinfonía increible. Es una canción que nos gusta mucho y que para cantar es durísima y estupenda.
JPP: ¿Qué influencias personales tiene usted como músico y qué banda, grupo o artista es el que más admira?
JG: Lógicamente como nosotros no hemos inventado el rock and roll por desgracia que es una gran pena (risas…) Led Zeppelin con lo versátiles que son o AC/DC que miralos como están. Llenan estadios después de 35 años. Tuvieron una racha hace como 10 años ligeramente pero sin embargo hay que ver con la fuerza que mantienen su vigencia siempre. Afortunadamente para todos. JUDAS PRIEST, también. Las bandas clásicas es que no hay otras. Nadie ha conseguido superarlos.
JPP: Hacia la parte interna de Angeles Del Infierno hay algunas canciones que la gente las ha tachado de diabólicas porque el público en ocasiones no alcanza a entender lo que realmente quiere demostrar Angeles. Qué identifican las letras de ustedes y qué les podemos decir a los rockeros que no entienden el sentido de estas composiciones?
JG: Algunas canciones se pueden interpretar de algunas maneras. Por ejemplo «Maldito sea tu nombre». Algunos dicen va por Dios, otros que va para el diablo. Y en realidad va por el dinero. Contiene una buena metáfora. Está muy bien construida. Pero en general las letras de Angeles son muy claras. Reivindicativas. Siempre con un factor constructivo. Nunca destructivas. Y lo que nuestras canciones alientan es a superarse. Al positivismo. A conseguir cosas para no quedarse dormido en tu casa y que nos venzan en todo sentido. Nos referimos a lo que ha pasado en el mundo. Por habernos quedado dormidos mira lo que nos pasa a todos. Una mega crisis mundial. Hemos sido súbditos de la desidia y los banqueros se han quedado con todo nuestro dinero, los políticos especularon con todas las vidas del planeta y está el planeta peor que hace 20 años. Por no hacer nada. Frente a eso nuestras letras siguen con una vigencia absoluta. Como «El principio del fin» que es una letra muy ecologista. Los chicos de 15 y 17 años nos siguen buscando. Si hubiesemos escrito estupideces no estariamos aquí.
AB: Algún momento agradable para evocar de sus conciertos mundiales?
JG: Hemos tocado en cuatro selvas. En Tuxtla Gutiérrez Chiapas, en Zamora cerca de Loja, la Amazonia ecuatoriana cercana a Perú. Con un recorrido de cuatro horas por las montañas. Algo increible! Estuvimos también tocando en Merida Yucatán y luego nos fuimos a una selva que hay en Costa Rica. Todo un rollo muy ecologista. Cuatro selvas seguidas. Llenos de picaduras de mosquitos. Excelente experiencia de vida.
JPP: Hablando un poco del aguardiente colombiano qué es lo que mas le gusta de nuestra tierra?
JG: Conozco de Colombia Bogotá, Cali, Medellín y Pereira que los hemos visitado un par de veces. Todo ha sido en avión pero hemos hecho trayectos de carretera de 40 y 50 kilómetros. Es muy verde en general Colombia. Lo que más me gusta es la zona de La Candelaria que es como muy bonito. Bastante colonial. Aparte de las mujeres tan guapas que tienen ustedes en todo su país. Aquí tienen un toque muy especial. Sobre el aguardiente les he dicho a nuestros compañeros mexicanos que tengan cuidado. Porque entra suave y castiga duro (risas…)
JPP: A quién le agradece Juan y la banda todo lo que llevan de trayectoria como grupo?
JG: A las miles de millones de personas que escuchan nuestra música. Cuanta gente se ha casado o se han hecho novios con las baladas de Angeles Del Infierno. Y por otra parte cuantos entierros por desgracia se ha tocado «Al otro lado del silencio». Que despierten emociones las canciones… Eso no tiene precio. Y que la gente te lo diga con eso ya estás bien pagado.
JPP. Cuál es el llamado que le puedes hacer a la humanidad como una banda como lo decías anteriormente que se ha empeñado en hacer un llamado de atención de cosas que pasan en el mundo?
JG. Es sencillo! Que estamos en una encrucijada mundial muy grande. Tenemos unos políticos en general que no están preparados para liderar o dirigir el mundo, además de la globalización de la banca que mira lo que hace. Es un puto desastre. Si nosotros no intentamos arreglarlo estamos perdidos. La mejor respuesta es ser contestatarios pero sin violencia. Se puede salir a la calle y protestar sin armar bronca. Que la armen ellos si quieren. El punto clave es reivindicar nuestros derechos. Hoy en día parece mentira que cada cuatro segundos se muere un niño de hambre. Como es posible si hay comida de sobra para todos. Y siempre seguimos con el mismo rollo pero nunca se soluciona esto. Y a las iglesias también. Hay una parte de la iglesia que si es positiva. La gente de la teología de la iluminación. Los jesuitas. Esos si son santos de verdad. Viven y sufren con los que están mal. Esa es la parte que me gusta. Y la otra no tanto que es la de los oropeles y la del Vaticano. Hay aquí muchas cosas que reivindicar. Deberíamos estar aquí en el 2009 con una serie de reglas sociales como que no muera ningún niño. Eso es lo que hay que hacer. Uno a uno como hormiguitas a reivindicar. Salir a la calle a protestar que estamos en todo nuestro derecho.
AB: Dos momentos de la historia para cambiar que no le hubiese gustado que ocurrieran? Para dejarlos pasar. Cuáles?
JG: Qué pregunta más difícil… La bomba atómica de Hiroshima y Nagasaki sería una cosa que nunca tendría que haber ocurrido. Es un momento muy triste para la humanidad. Y otro momento que cambiaría sería el actual que tenemos por otro más bonito y mejor para toda la humanidad. Yo creo que son dos momentos que no tienen relación entre sí pero la tienen en parte de todos modos.
AB: Cuál es el mayor valor que lo tiene a usted en Angeles Del Infierno?
JG: A mi me tiene aquí, aparte de que me la paso muy bien, que eso es casi lo de menos, las vivencias que he aprendido y la gente que conozco. Sobre todo el buen rollo que tenemos nosotros en la banda. Sobre todo el cariño que la gente nos tiene y les tenemos. Vamos por ahí y las gente nos cuenta cosas agradables que llenan el alma. Además de vivir también momentos mágicos en concierto como el más reciente en Bogotá.
JPP: Finalmente un saludo para Rock City Night y El Fortín del caballero negro?
JG: Para Rock City Nighy y el Fortin del Caballero animarles a que sigan en su línea. Y como siempre ustedes saben que el trabajo que han hecho hoy puede estar muy bien pero mañana es otro día. Hay que darle muchísimo más duro y nunca hechar atrás ni para coger impulso. Lo están haciendo muy bien pero mañana más y mejor. Saludos a todos los hermanos del rock que creen en sus propios sueños y los materializan.